- Junta de Vigilancia del Río Ñuble espera que el anhelado embalse sea confirmado como el proyecto más importante de la región, con un cronograma claro y plazos bien definidos.
San Carlos. A solo semanas de la presentación oficial del Plan Ñuble por parte del Presidente Sebastián Piñera, los regantes de la principal cuenca de la región ya visualizan al embalse La Punilla encabezando el listado de proyectos que presentará el primer mandatario.
Si bien hasta ahora el gobierno ha confirmado plenamente la mega obra de riego, tanto en la ceremonia de inicio de la región en septiembre pasado, como en ocasiones posteriores, los regantes esperan que esta vez exista mayor precisión en el desarrollo del cronograma y en los plazos de ejecución de la obra.
“Dado el nivel de detalle del Plan Ñuble, es una excelente oportunidad para conocer de forma más específica cómo se llevará a cabo el proyecto, con metas claras en los tiempos de ejecución, metodología de trabajo y vinculación con el concesionario”, sostuvo la presidenta de la Junta de Vigilancia del Río Ñuble, Margarita Letelier.
La dirigente agregó que “nosotros valoramos que el Presidente, desde su primer Gobierno, haya priorizado esta obra como la más importante de la región, por lo que no tenemos dudas de que nuevamente se dará un espaldarazo a la agricultura de Ñuble. Lo que ahora se requiere es precisar ese compromiso, enfrentar con claridad esta nueva etapa”.
Los regantes últimamente han sostenido diversas reuniones con el MOP, desde donde han ratificado de forma permanente al embalse La Punilla como una de las 13 obras más importantes en ejecución del país, sin embargo, el anuncio del Plan Ñuble constituye para los agricultores de la región una connotación distinta.
“Estamos en presencia de un instrumento que es comprometido directamente por el Presidente y el Gobierno de Chile, para impulsar la región en todas las áreas donde se visualizan debilidades. La agricultura es la actividad más sensible en este diagnóstico, porque la escasez de agua es una barrera enorme para convertirnos algún día en potencia agroalimentaria, poder desarrollar al mundo rural y sacarlo de los niveles de pobreza en que actualmente se encuentra”, indicó la representante de la organización de regantes.
De esta forma, el impacto social y económico del embalse es a juicio de Letelier una razón fundamental para poner suma urgencia a su ejecución.
“Esta vez anhelamos algo distinto, salir un poco de los compromisos genéricos, porque ya sabemos que el Gobierno quiere impulsar el proyecto. Ahora, con el Plan Ñuble, es la oportunidad de dar un paso gigante, de devolverle a nuestras comunidades la esperanza de que sí tenemos las competencias e instrumentos para posicionarnos frente al país como una región agroindustrial, intensiva en riego y productos agrícolas de alta rentabilidad”, sentenció.